Bridget Ertz (Hilary Swank) ha regresado por petición de su hermano Nicky (Michael Shannon) a su natal Chicago. Una vez en casa Bridget deberá de enfrentar a su padre y convencerlo de internar a su madre Ruth (Blythe Danner), enferma con Alzheimer, en un asilo donde puedan ayudarlos a cuidarla durante la última etapa de su vida.